Vinos
de la Ribeira Sacra, una tradición que se recuperó exitosamente.
Una de
las cosas que más destacas después de los vinos
de la Ribeira Sacra, son los paisajes de la zona, donde resaltan los
bancales, también conocidos como terrazas de cultivos, donde se pueden cosechar
las uvas usadas para la producción de los vinos. A pesar de ser considerada una
Denominación de Origen a partir de 1997, fue el viejo imperio romano el que
comenzó a arañar el terreno para sacar el mayor provecho y comenzar la
producción de vino en esta área.
Durante los últimos 20 años, se ha dado
el renacimiento a los vinos de la
Ribeira Sacra, luego de que pudiese consagrarse la zona como una
Denominación de Origen y el sistema productivo de la región, pudiese
reanimarse. Las cifras de bodegas se han mantenido sobre las 90 bodegas, sin
embargo, en el 2014, eran 89 bodegas las que permanecían adscritas, pudiendo
producir hasta 3.000.000 de litros, frente a los 5 millones producidos por las
casi 99 bodegas funcionales del año 2010.
Las bodegas que fabrican los vinos de la Ribeira Sacra, participan
en la Cata dos Viños, un festival de Cata anual donde hasta 30 bodegas
participan ofreciendo 55 de los mejores vinos de la región, y al final, se
ofrece un premio al mejor de todos ellos. De entre los mejores vinos que
pudieron presentarse este año en el concurso, podemos destacar entre los tintos
al P Ponte da Boga, un vino tinto de uvas de Mencía el cual se llevó el primer
lugar. Este vino pertenece a Adega Ponte da Boga, bodega de la cual es dueño
Castro Caldelas.
En cuanto a los vinos blancos de la Ribeira Sacra, el primer
lugar fue para un vino de Sober Lugo, que a través de su bodega Regina Viarum,
ofreció al paladar el Regina Viarun de las uvas de Godello.